La vigilancia con cámaras prolifera en los espacios urbanos y cada vez es más intrusiva en la privacidad de las personas. Este trabajo parte de la necesidad de entender cómo está configurado y se ha modificado el ensamblado de vigilancia con cámaras en Medellín y de manera particular, analizar las relaciones y usos que se dan alrededor de este tipo de sistemas en un contexto de ciudad neoliberal. Aunque hay un discurso determinista y de atajo tecnológico que parte desde las autoridades de la ciudad, potenciado por el modelo neoliberal y de marca ciudad, donde la cámara se convierte en un actante que garantiza la seguridad y que responde a unos intereses, esta investigación permite concluir que se configura un teatro tecnológico de la vigilancia donde se terminan persiguiendo incivilidades para dar la sensación de que se hace algo frente a la inseguridad y validar el discurso, pero que en últimas, genera divisiones en la ciudad y excluye al otro